El Octuple Sendero - parte 1 -

 Lo primero es entender que estamos atrapados en la dualidad, y este hecho provoca la pérdida de la consciencia lucida y la unidad: La separación de la Bodhi -naturaleza búdica-.

El Budha histórico abandono sus pertenencias, estatus y su familia para resolver el problema del sufrimiento: la enfermedad, la vejez y la muerte. Estos tres hechos provocaron en él un movimiento y determinación radical que lo empujaron a la búsqueda y solución de este problema.

Descubrió que el verdadero motivo del sufrimiento no era el sufrimiento como tal, sino el apego este -llamado la segunda flecha en el budismo- desde la no aceptación de la impermanencia y la transitoriedad de la vida  y la prevalencia del ego.

Así descubrió que el origen último del sufrimiento son  la ignorancia de estar atrapados en la dualidad y separados de la Bodhi. En consecuencia atrapados en la deseo, hecho que lleva a una constante búsqueda de la satisfacción, al rechazo o al apego, y la cólera como resultado de esta aversión-apego dualista. Identificación que  catalogo como los tres venenos: la ignorancia, la avidez y la cólera.

Profundizando en este hecho y entendemos por que el humano funciona desde este prisma vital. Básicamente podemos decir que al estar separado de la Bodhi experimenta una "sed" constante por obtener el objeto de su creencia basada en la ignorancia o el la dualidad. Si esta experimentación la realizara desde un espíritu desapegado y como una oportunidad de obtener información, la experiencia se convertirá en una experiencia significativa para ver desde uno, que experiencias le llevan a una satisfacción real o no, que puede conservar como parte de la consciencia y que necesita dejar ir.

Desde esta perspectiva la propia búsqueda de la Bodhi se puede convierte en la búsqueda instrumental y dualista y/o a la vez la transcendencia de la dualidad y el  encuentro de la naturaleza e despierta: La Bodhi. 

Este hecho lucido de entendimiento del origen del sufrimiento se dio por él deslumbro desde la Bodhi -que funciona como un espejo del alma- del proceso de identificación dualista. Como una experiencia.

Hay que incidir que la verdadera sabiduría transciende la razón, es una experiencia de realización de algo que tiene que ver con el darse cuenta como un hecho lucido más que racional, con la conciencia que se manifiesta , con la energía que se libera.

Volvemos al primer principio o radio del óctuple sendero, que es el timón del los 7 radios restantes: Pensamiento correcto, palabra correcta, acción correcta, esfuerzo correcto, atención correcta, y meditación correcta.

El pensamiento correcto surge del entendimiento correcto, para no incidir mas la ignorancia y la dualidad. Así necesitamos hacer un movimiento de no hacer, o mejor dicho parar la forma automática de pensamiento, basado en la concepción dualista. Por este motivo el pensamiento correcto no es pensamiento ordinario ni dualismo, sino la experiencia de silencio interno que nace de esta nueva manera de afrontar los pensamientos. 

Podemos decir que la raíz del pensamiento correcto es el silencio interno que posibilita poder ver la cosas tan cual son -Vipasssana-.:Fundamentalmente  llegar a la experiencia de silencio interno. 

Este forma de pensar es una experiencia en la que participan el cuerpo, la  respiración y la atención consciente. Podemos  decir que la forma correcta de pensar es no pensar, parar la forma ordinaria de pensar para estabilizar el silencio interno. A partir de esta experiencia que se realiza en la meditación podemos acceder a una forma de pensar en unidad con la conciencia universal, y acceder a información de tipo telepático que esta disponible dentro de una masa metafórica de energía, consciencia e información de la que todo forma parte. 

La meditación  o zazen, es la forma en la que se lleva a la práctica el óctuple sendero, por que se ponen en práctica los ocho ítems a la vez de manera simultanea. A la vez estos ítems estan profundamente unidos, no se puede dar si alguno  no esta presente.

Vipassana: Es la visón de los fenómenos y experiencias sin el filtro de la dualidad, desde una consciencia lucida